FELICITACIÓN EN NAVIDAD
Dios, que es amor, ha querido hacerse un Niño pequeño, expresión perfecta de lo que es el amor hecho vida humana. Desde toda la eternidad previó que los hombres, tú y yo, íbamos a estar necesitados de salvación, por ello, decretó hacerse uno de nosotros, para que nosotros fuéramos hijos de Dios y pudiéramos ser felices con Él en el cielo.
Para llevar a cabo su proyecto de amor salvador tomó carne en las entrañas virginales de la Virgen María y nació en un establo, lugar muy adecuado para nacer un animal. No tuvo inconveniente, aunque era el Dios de los cielos y de la tierra. De esa manera, se hacía semejante en todo a nosotros menos en el pecado, compartiendo nuestras necesidades y sufrimientos. ¡Qué bueno ha sido con nosotros el Emmanuel, el Dios con nosotros!
Un año, más vamos a celebrar el aniversario de su Nacimiento. Te deseo una Feliz Navidad en compañía de toda tu familia. Os deseo toda clase de bienes, especialmente, la paz, el amor, la santidad y unos deseos grandes de trabajar por Él para extender su Reino, que es reino de paz, de amor, de justicia y salvación.
Hay una manera de mostrar que el Niño de Belén está entre nosotros. Es atender a sus predilectos, y éstos son los pobres y necesitados. Tú, al formar parte de Cáritas Parroquial, estás intentando llevar a cabo esa noble tarea. Dios, como premio, te dirá: “Ven, bendito/a de mi Padre... entra en el gozo de tu Señor”. Yo, como hermano mayor de esta familia que es la parroquia, te digo desde el corazón: Gracias y que Dios te bendiga.
Fdo.: Alfonso Martínez Sanz
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